Adèu Miguel Adèu

El miércoles murió Miguel Núñez. Nos es este el espacio para hacer glosas ni necrològicas. Quien no le conozca le recomiendo que lea su libro y/o entre en alguno de los espacios web en que se le recuerda como http://miguel-n.blogspot.com

Por mi parte un primer recuerdo de hace más o menos 16 años. Un grupo de jóvenes de Cornellà, del IES Francesc Macià, decidimos que queríamos hacer una exposición sobre "el che", le pedimos a Eliseo, el del trailer, que nos echara una mano, y en unos días teníamos cerca de 40 fotos diversas sobre la "vida y milagros" del gran revolucionario de la segunda mitad del siglo XX.
El día de la presentación de la expo, vino un señor entrañable, un “señor que seguro que para lo viejo que parece conoció al che” como dijeron algunos. Era Miguel Núñez, ya en aquellos momentos, ejemplo de compromiso social, militancia y lucha por la democracia. Miguel nos desmitificó al Che, nos hizo ver la importancia del compromiso individual en las luchas colectivas. Joder, nosotros que éramos los más revolucionarios, y ese señor que no nos dice que el CHE era el más grande! Nos hundió el mito, pero nos defendió la necesidad de los pueblos latinoamericanos de cambiar su situación de explotación. Nos defendió la importancia del colectivo por delante de las personas.
Creo que muchos de los jóvenes, y de los no tan jóvenes, que aquella tarde estuvimos con el en Cornellà, que le escuchamos, le habremos recordado estos días seguro. Yo tuve la suerte de coincidir con él muchas más veces, en actos de ICV o del PSUC, en la Juntas de ACSUR, y la verdad és que, aunque algunos días podía parecer un pelo “pesao”, si querías siempre podía aprender de él. Haremos lo que hizo él con el Che aquel día; no le mitificaremos. Pero si que recordaremos a la persona comprometida, siempre comprometida, que sabia que papel le correspondía en cada momento. Cuando le toco liderar lideró, cuando tuvo que dejar paso a otras personas lo hizo porque era lo mejor “para todos y todas”. Los “todos” por delante de los personalismos que Miguel sabía que tanto daño han hecho a la izquierda.
En fin, espero que su recuerdo nos sirva para recuperar parte de su ejemplo, y implicar-nos un poco más en algunas de las pequeñas luchas cotidianas que tiene nuestra sociedad; en nuestro trabajo, en el asociacionismo, o en la política.

Se fue Miguel, el ciudadano Miguel. Un abrazo maestro

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